¿Por qué se hace necesario cambiar nuestra forma de pensar? Es importante para mejorar nuestra calidad de vida, hacerla satisfactoria. Cambiarla porque si nuestro pensamiento o creencia es que "no estoy ya para aprender nada más", así será. En esta nueva Era eso es un verdadero atraso, todo va muy rápido y hay que actualizar todo el tiempo la información que nos llega, que es mucha. No hay más que ver cuanto duran los trabajos, todos conocemos personas que empezaron en una empresa y se jubilaron en ella. Esto ya no es así, incluso siendo profesional cualificado hay que renovarse o quedarse atrás, innovar. Podemos estar de acuerdo en que hemos de cambiar el pensamiento inicial que nos dice que "ya no estoy para aprender nada más", hay que desechar esta idea e incorporar la que la ha de sustituir, que es que "puedo aprender y aprendo cosas nuevas y aplicarlas en mi vida".
Este es sólo un ejemplo claro para ver su aplicación práctica en estos días, pero esto se extiende a todo ámbito de nuestra vida. En otro caso o el mismo el pensamiento puede ser "como envié el curriculum en viernes no me llamarán", así escrito se ve claro que es absurdo, bueno de estos pensamientos "absurdos" estamos llenos e igualmente es absurdo el anterior, tengamos la edad que tengamos siempre podemos aprender cosas nuevas para crear nuevas conexiones neuronales.
En otro caso es pensar que aparcar es difícil en tu barrio, pues así será para ti.
Que no puedes ponerte a dieta porque te llenarás de ansiedad, así será para ti.
¿Cómo podemos cambiar nuestros pensamientos o creencias?
Cuando tomamos conciencia de lo que pensamos respecto a situaciones o personas es el momento para transformar ese pensamiento y crear una nueva experiencia relacionada con ese situación o persona.
La meditación es una herramienta poderosa para observar nuestros pensamientos, esa serie de "verdades" que nos inculcan desde que nacemos, para poder aceptarlos si van con nuestra persona o desecharlos si no nos aportan nada ya. También nos ayuda en la tarea de conocer las conclusiones a las que llegamos a partir de nuestras experiencias personales.
Recomendaciones para sostener los cambios que generamos.
Dejar de ver televisión, o escoger muy bien los programas que visualizamos, no hablar si no es necesario, dejar las conversaciones que no aportan nada, no emitir juicio sobre los pensamientos que descubrimos, sólo observarlos, aceptar que los tenemos y elegir por cual otro lo cambiamos. Para observarlos hay que prestar atención, como si viéramos en una película nuestra vida. Meditar se hace imprescindible pues es el momento en que nos ponemos activamente a observar, creando un espacio en el tiempo de forma cotidiana, para poder visionar nuestra película.
¿Cómo es tu película?
Mira cómo es tu vida y sabrás que piensas de ti.
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| Tengamos bellos pensamientos |
