Lo primero es saber qué son y que todos los tenemos, aunque a veces me dicen "yo no creo en eso". Tenemos chacras y tenemos distintas capas de aura, cada capa relacionada con un chacra. No se trata de creencias, no es cuestión de fe. No vemos nuestro hígado pero sabemos que tenemos uno. Sólo el cirujano lo ve cuando lo opera o el médico lo ve en una ecografía. Pero nosotros mismos no nos vemos el hígado. Nosotros somos más que nuestro cuerpo físico, más de lo que vemos y palpamos. Nuestro trasero no lo vemos pero sí lo palpamos y así constatamos que lo tenemos. Nos sentamos en él, no sentimos su falta. No vemos las ondas de radio pero las recogemos en nuestros aparatos eléctricos y escuchamos música y nuestra programación favorita.
Quiero dar una explicación sencilla que iré ampliando, pero para empezar diré que este es un conocimiento básico de cómo funciona nuestro cuerpo energéticamente, y creo que puede interesar a muchos saber cómo funcionan los chacras y así ayudarnos a nosotros mismos.
 |
| Los chacras. Colores asociados, situación en cuerpo y símbolo sánscrito |
En nuestro cuerpo tenemos 7 chacras principales que recorren la columna vertebral. Llegan a 21 los chacras menores. y a muchísimos los nadis. Los chacras principales o mayores metabolizan las energías que nos rodean, son sutiles pero pueden ser de origen humano o vegetal o mineral o terrestres o cósmicas, por decir algunas. Las emociones y pensamientos son energías y las vamos emitiendo lo queramos o no. Y recogemos las de los demás lo queramos o no. Vivir con consciencia nos permite metabolizarlas mejor, emitir buenas ondas y, digamos, neutralizar las malas.
 |
| VISTA LATERAL |
Los chacras son dinámicos y giran y es deseable que sea en sentido horario. También es deseable que emitan una determinada frecuencia o color, si preferís el término.
Su función es psicodinámica, de tal forma que si no gira en sentido horario o su frecuencia no emite el color asociado algo pasa en nuestras relaciones, por lo psicológico. Cuando digo relaciones quiero decir la relación que tenemos con los conceptos (tiempo, amor, trabajo...), actitudes (orgullo, egocentrismo, vanidad, pereza...), también personas (figuras paternas, hijos, hermanos, políticos, sistema médico, superiores...), sea con el entorno (los ambientes cerrados, los espacios abiertos, los húmedos...) o con nosotros mismos (yo no puedo, tenía que haber dicho y hecho esto o lo otro, no soy lo bastante bueno, no obtengo lo que necesito...), que en definitiva es lo mismo. Y a la larga, o quizás no tanto, nuestra salud física se ve afectada. Las dolencias se relacionan con los chacras por la zona donde se ubican, de modo que si hay problemas respiratorios el cuarto chacra, llamado anahata o del corazón, estará afectado también, si hay problemas de ovarios el segundo chacra está afectado también, si es de estómago es el tercer chacra, por ejemplo.
Cuando un chacra no ha estado funcionando bien y empieza a hacerlo es normal que otro cercano se cierre un poco, por supervivencia, no podemos manejar esa cantidad de energía pura a la vez sin acostumbrarnos primero.
Tener los chacras equilibrados es una de las cosas deseables y difíciles pero no imposibles. Digo equilibrados, no activos al tope. Tenerlos activados al 100%... hemos de avanzar mucho como humanidad para llegar a eso. Como el camino es largo, pongámonos en marcha.
Reiki, meditación, acupuntura, respiración consciente, yoga, chi-kung, ayunos, terapia del color, del sonido, por citar algunas herramientas que ayudan.
